Así como el sediento busca
la vertiente de agua fresca,
así mi corazón te busca a ti Señor.
Y como un hijo busca
el abrazo de su padre,
así estoy yo buscándote a ti Señor.
Y te busco
Y te llamo
te deseo, dónde estas Señor.
Y tu te haces presente
en el silencio te haces fuerte,
no estoy solo, ahora contigo estoy.
Me inundas de tu vida
en mi eres fuente de agua viva,
tu torrente desborda mi corazón.
y te busco
y te llamo
me deseas cuerpo y sangre derramado me doy.