Rompe esas cadenas, Espíritu;
esas que no dejan concentrar,
para que yo pueda rezar en paz.
Que nada me impida estar acá.
Que nada me importe, nada más que
sentirme protegido, acompañado,
amado y perdonado.
Por eso ve---en, Espíritu Santo.
Por eso ve---en, Espíritu Santo.