Por tu Palabra, Señor, te damos gracias,
porque quisiste llenar el corazón
de estos tus hijos que te escuchan y te alaban
y necesitan de tu gracia y de tu voz…
Al escucharte se transforman nuestras vidas,
Vos renovás con tu Palabra nuestro amor,
nos invitás a construir un mundo nuevo,
un mundo donde no haya odio ni rencor.