La Iglesia debe estar presente en la cultura popular y en los medios de comunicación masivos, pero también debe ser una voz crítica y una defensora de los valores cristianos.
La Iglesia tiene la misión de evangelizar y de ser una luz en el mundo, como lo dice Jesús en el Evangelio de Mateo: "Vosotros sois la luz del mundo" (Mt 5, 14). Por lo tanto, debe estar presente en todos los ámbitos de la sociedad, incluyendo la cultura popular y los medios de comunicación masivos.
La Iglesia debe ser una voz crítica en la sociedad, denunciando las injusticias y defendiendo los valores cristianos. Como dice el Apóstol Pablo: "No os dejéis llevar por la corriente del mundo" (Rm 12, 2). Debe ser una voz que promueva la justicia, la paz y el amor, y que defienda la dignidad de todas las personas.