La Iglesia debe promover la protección y el cuidado del medio ambiente, y defender la vida y la dignidad de las criaturas.
La Iglesia Católica enseña que el cuidado del medio ambiente es una parte fundamental de la misión de proteger la creación de Dios.
La defensa de la vida y la dignidad de las criaturas es un principio fundamental de la enseñanza católica, como se refleja en el mandamiento "No matarás" (Éxodo 20, 13) y en el amor y el respeto por todas las criaturas que Dios nos ha confiado.