La Iglesia debe seguir adelante en su misión de evangelizar en el mundo y promover la nueva evangelización en los diferentes contextos culturales y sociales.
La evangelización es fundamental para que la Iglesia pueda cumplir con su cometido de compartir el mensaje de Jesucristo con todas las personas.
En este sentido, la Iglesia debe estar atenta a los desafíos y oportunidades que se presentan en los diferentes contextos culturales y sociales, y encontrar formas efectivas de promover la fe y el amor a Dios en cada uno de ellos. La Iglesia debe continuar trabajando para que la Buena Nueva de la salvación llegue a todos los rincones del mundo.