Biblia y tradición
Es bastante común que a los católicos se nos critique por seguir “ciertas” TRADICIONES. Puede que se nos diga: “yo no sigo tradiciones de hombres, como ustedes”, señalando:
Mateo 15, 3: Jesús contestó: «Y ustedes, ¿por qué quebrantan el mandamiento de Dios en nombre de sus tradiciones?
¡Abordemos este tema en 3 pasos!
1- Veamos el contexto del pasaje
Es importante entender qué es lo que Jesús quiso decir, leyendo los siguientes 3 versículos de este pasaje de san Mateo:
4 Pues Dios ordenó: Cumple tus deberes con tu padre y con tu madre. Y también: El que maldiga a su padre o a su madre debe ser condenado a muerte. 5 En cambio, según ustedes, es correcto decir a su padre o a su madre: Lo que podías esperar de mí, ya lo tengo reservado para el Templo. 6 En este caso, según ustedes, una persona queda libre de sus deberes para con su padre y su madre. Y es así como ustedes ANULAN el mandamiento de Dios en nombre de sus tradiciones.
Nuestro Señor explicaba que el cumplir con el cuarto mandamiento de honrar a padre y madre, incluía ayudarles económicamente. Sin embargo, los fariseos tendían a evadir esta responsabilidad dedicando sus bienes como donativo para Dios, quebrando así, la ley del Señor.
2- Significado de “Tradición”
La palabra utilizada en su idioma original
La palabra griega que utilizó san Mateo para tradiciones fue “Paradosis”. Esa misma palabra se utilizó san Pablo en 1 Corintios 11, 2 en su idioma original: “Os ALABO porque en todas las cosas os acordáis de mí y CONSERVÁIS las TRADICIONES tal como os las he transmitido.” ¿Se contradice acaso la Biblia? ¡IMPOSIBLE!
Definición de la Real Academia
Resaltemos las definiciones número 1 y 4 que son las que aplican a nuestro contexto:
Definición #1: Transmisión de noticias, composiciones literarias, doctrinas, ritos, COSTUMBRES, etc., hecha de generación en generación.
Esta primera definición es la que aplica a la que se refería Jesús. Los fariseos, se transmitieron una COSTUMBRE mala, que ANULABA el mandamiento de Dios.
Definición #4: En varias religiones, cada una de las ENSEÑANZAS o DOCTRINAS transmitidas ORALMENTE o por ESCRITO desde los tiempos antiguos, o el conjunto de ellas.
3- Sentido Común
¿Será que las tradiciones cristianas son malas? ¿Sería malo, quizás, ir al templo por lo menos una vez a la semana? Evidentemente, no.
Jesús habla en contra de las tradiciones que específicamente ANULAN la ley de Dios. ¿Estaría Jesús en desacuerdo con una tradición que le honre? ¿Como quizás reunirnos todos los viernes por la tarde a orar en familia? Es sumamente importante prestarle mucha atención al tipo de tradiciones que Jesús demandaba.
Pues, hermanos, la Biblia es nada más que el resultado de la tradición escrita que heredamos de los apóstoles. El hecho mismo de que los cristianos hayan creído en la Biblia, es en sí una tradición. Las sagradas escrituras nos lo demuestran:
2 Tesalonicenses 2, 15
Así pues, hermanos, MANTENEOS FIRMES y CONSERVAD las tradiciones que habéis aprendido de nosotros, de VIVA VOZ o por CARTA.
Es importante darnos cuenta de que somos vigorosamente exhortados por Dios a conservar tanto la tradición escrita, como la oral. Y, ¿qué dice la Biblia acerca de las tradiciones transmitidas oralmente? Si leemos con atención, veremos que Jesús nunca escribió nada, ni envió a sus discípulos a escribir:
Marcos 16, 15: Id y PREDICAR el evangelio a todas las naciones.
Por otro lado, queda muy claro que la fe se adquiere escuchando la palabra de Dios
Romanos 10, 17: por tanto la fe viene de la predicación
1 Corintios 15, 1-2: Hermanos, les recuerdo la Buena Nueva que les PREDIQUÉ, y que ustedes recibieron y en la que perseveran firmes. Por ese Evangelio ustedes se salvan, con tal que lo guarden TAL COMO YO SE LOS PREDIQUÉ. De otro modo HAN CREÍDO EN VANO”
1 Corintios 11, 2: Os alabo porque en todas las cosas os acordáis de mí y conserváis las tradiciones (paradosis*) tal como os las he transmitido.
I Corintios 11, 23: Porque yo recibí del Señor lo que os he transmitido: que el Señor Jesús, la noche en que fue entregado, tomó pan,
2 Timoteo 2, 2: y cuanto me has oído en presencia de muchos testigos, confíalo a hombres fieles que sean capaces de instruir a otros.
¿De qué nos habla San Pablo en 2 Timoteo? Simplemente de SUCESIÓN APOSTÓLICA. Jesús les da el poder a aquellos hombres para PREDICAR, y fueron algunos de ellos y otros apóstoles quienes más adelante, sin saberlo, escribirían el nuevo testamento que hoy tenemos. Y ¿qué cosa fue lo que los apóstoles entendieron que era su MISIÓN y PRIORIDAD?
2 Juan 1:12 Aunque tengo muchas cosas que escribirles, NO QUIERO HACERLO CON PAPEL Y TINTA, sino que espero ir a VERLOS y HABLAR con ustedes cara a cara, para que su gozo sea completo.
1 Timoteo 3:14 Te escribo estas cosas, esperando ir a VERTE pronto, 15 pero EN CASO QUE ME TARDE te escribo para que sepas cómo debe conducirse uno en la casa de Dios, que es la iglesia del Dios vivo, columna y sostén de la verdad.
¿Podría ser posible que estas tradiciones orales murieran con los apóstoles?
Juan 14, 24 El que no me ama no guarda MIS PALABRAS. Y la palabra que escucháis no es mía, sino del Padre que me ha enviado. 25 Os he dicho estas cosas estando entre vosotros. 26 Pero el Paráclito, el Espíritu Santo, que el Padre enviará en mi nombre, os lo ENSEÑARÁ todo y os RECORDARÁ todo lo que yo os he DICHO.
Mateo 28, 20 Jesús nos dijo «Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y ENSEÑÁNDOLES A GUARDAR TODO LO QUE YO OS HE MANDADO. Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.»
¿A quién le vamos a creer? Es IMPOSIBLE que Jesús no cumpla su palabra. Él nos envió el Espíritu Santo, y prometió a SU Iglesia que estaría con ella todos los días, hasta el fin del mundo.
Resumiendo, la Biblia es el resultado de la tradición escrita. Para ser capaces de tener la verdad absoluta de Cristo, debemos contar también con la tradición oral, de otro modo tendríamos sólo con una parte de aquella verdad. Si realmente amamos a Cristo, nosotros lo queremos TODO, y no nos conformaremos con sólo una parte.
Recordemos que SIEMPRE hace falta dirigirse a la Iglesia fundada por Cristo en los APÓSTOLES, la cual que escogió los libros que tiene nuestra Biblia, porque la Iglesia es la columna y el fundamento de la verdad (1 Timoteo 3:15). Tengamos en cuenta, además, que la Biblia no cayó del cielo por arte de magia. En el Concilio de Hipona (393 d.C.) y en el Concilio de Cartago (397 d.C.) se escogieron los 27 libros del N.T., luego de la muerte de Constantino. ¿Quién tiene el poder de escoger los libros de la Biblia? La Iglesia que Cristo fundó en los APÓSTOLES. Nuestra iglesia es APOSTÓLICA, tiene una línea directa desde san Pedro hasta el Papa actual. Y cuenta con la doctrina enseñada VERBALMENTE y POR ESCRITO (2 Tesalonicenses 2, 15) ya que toda la verdad no está en la Biblia (Juan 21, 25).
Es, además, de vital importancia tomar en cuenta la exhortación de la iglesia en el numeral 133 de nuestro catecismo:
“La Iglesia «recomienda de modo especial e insistentemente a todos los fieles la lectura asidua de las divinas Escrituras para que adquieran «la ciencia suprema de Jesucristo» (Flp 3,8), «pues desconocer la Escritura es desconocer a Cristo»”
No dejemos de honrar a Cristo en su GRAN DESEO de que permanezcamos siempre siendo UNO: Juan 17, 20-23. Y que sobre todo NOS PONGAMOS DE ACUERDO Y HABLEMOS UNA MISMA COSA (1 Corintios 1, 10).