La Evangelización en el Perú
La cristianización y la conquista del Perú se desarrollaron de manera simultánea desde la perspectiva de los Papas y la Corona Española. Para ellos, la conquista de estas tierras se justificaba por el hecho evangelizador, que liberaría a muchas almas idólatras del maligno y las llevaría a conocer al verdadero Dios. Por otro lado, para los colonizadores, los fines de la conquista eran conseguir nuevos territorios, riquezas, dominio y prestigio social.
Sin embargo, con el tiempo, se hizo evidente que la mayoría de indígenas bautizados no habían sido realmente evangelizados. Esto permitió la supervivencia de sus creencias, debido en parte a la ignorancia de las lenguas indígenas por parte de los curas y la avidez por explotar a los indígenas.
Para subsanar este problema, se enviaron misiones de las órdenes religiosas a estas tierras. Una de las primeras en asentarse en Lima fue la Orden de los Mercedarios, que trabajó mucho en la nueva diócesis. Otro grupo importante fue la Orden de Predicadores, que trabajó en el Cuzco y fue una de las primeras en establecerse en el Perú.
Órdenes Religiosas que Llegaron al Perú
- 1532: Orden de los Predicadores (Dominicos), Orden de los Frailes Menores (Franciscanos) y Orden Real y Militar de Nuestra Señora de la Merced y la Redención de los Cautivos (Mercedarios)
- 1551: Orden de San Agustín (Agustinos)
- 1568: Compañía de Jesús (Jesuitas)
- 1592: Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo (Carmelitas)
Recién en el siglo XVII, los misioneros ingresaron a la selva para evangelizar a los indígenas paganos. Los franciscanos fueron los primeros en desarrollar esta labor, inicialmente desde Huánuco y posteriormente desde el colegio misionero de Ocopa.
Fray Jerónimo de Loayza y la Evangelización
Uno de los grandes impulsores de la labor evangelizadora en el Perú fue Fray Jerónimo de Loayza, primer arzobispo de Lima. Él convocó los dos primeros concilios de Lima, el primero en 1551, del cual emanaron las primeras directrices para la iglesia católica en los Andes: “Por primera vez, una orientación general que marcaría los primeros pasos de la iglesia católica nacida en los Andes”.
Su primera medida fue el bautizo de indígenas, que debían abandonar las prácticas idolátricas y todas las formas que iban contra las leyes eclesiásticas y contradecían los mandamientos católicos. También se ocupó de reglamentar el funcionamiento de las doctrinas repartiendo las provincias entre el clero secular y las órdenes religiosas.
Concilios de Lima
- 1551: Primer Concilio Limense, donde se establecieron las primeras directrices para la iglesia católica en los Andes.
- 1567-1568: Segundo Concilio Limense, donde se retomó la idea de destruir las huacas y colocar cruces o levantar iglesias o ermitas.
- 1582-1583: Tercer Concilio Limense, donde se reafirmaron las directrices de los dos anteriores concilios y se innovó en materia de textos y catecismo.