Miércoles de ceniza
¿Qué es el Miércoles de ceniza?
El Miércoles de ceniza es el primer día de la Cuaresma (cuarenta días antes de la Pascua).
Este día es una convocatoria a todos los Católicos al ayuno, a la oración y la penitencia. Es el día en el cuál Dios nos recuerda lo que verdaderamente somos, «ACUÉRDATE QUE ERES POLVO Y AL POLVO VOLVERÁS» (Gén 3,19), y vuelve a replantear aquél mensaje dado originalmente por Jesús, «ARREPENTÍOS, Y CREED EN EL EVANGELIO» (Mc 1,15).
La Iglesia transmite este mensaje con un acto Eclesial que está cargado de simbolismo, y que consiste en que el Sacerdote nos hace la Cruz con ceniza en la mollera o en la frente. A esto se le llama la imposición de la ceniza y nos recuerda que nuestra vida en la tierra es pasajera y que nuestra vida definitiva se encuentra junto a Dios.
Este acto Eclesial está inspirado en el pasaje Biblico del Libro de Ezequiel:
«Le dice: Recorre Jerusalén, marca con una cruz en la frente a los hombres que se lamentan y que gimen por todas esas prácticas escandalosas que se realizan en esta ciudad» (Ezequiel 9,4)
Bien, como dijimos, este acto Eclesial está cargado de simbolismo y ahora vamos a ver dos de estos símbolos y que significan.
1)La ceniza: La ceniza es símbolo de conversión.
Los judíos acostumbraban cubrirse de ceniza cuando hacían algún sacrificio y la usaban como signo de su deseo de conversión de su mala vida a una vida con Dios. Prácticamente se le asocia al polvo, simbolizando a la vez el pecado y la fragilidad humana. En el Antiguo Testamento también prevalece esta idea. El pecador es ceniza ( Sab 15,10; Ez 28,18) Para simbolizar esto, el pecador se sienta sobre la ceniza (Job 42,6; Jon 3,6; Mt 11,21) y se cubre con ella la cabeza (Jdt 4,11-15; 9,1; Ez 27,30).
2)La Cruz: La Cruz es símbolo del Sacrificio redentor de Cristo. Es en la Cruz donde encontramos el perdón a todos nuestros pecados (1°Jn 4,10).
Estos dos símbolos son los que le dan sentido al Miercoles de ceniza, y son los que nos ayudan a profundizar en este mensaje de conversión
Dios nos ayude a vivir este Miércoles de Ceniza con un corazón contrito, humillado y dispuesto al arrepentimiento.