¿Qué es la verdad?
Hermanos, la verdad existe y nos toca hacer todo lo posible para encontrarla, teniendo siempre esa hambre de Verdad. La verdad es el acto por el cual el intelecto capta la realidad, pero Jesús nos da otra definición: "Yo soy el camino, la verdad y la vida" (Jn 14, 6). Dios es la suma verdad y el fundamento de toda verdad. Esa hambre que siente el ser humano de la verdad a final de cuentas es hambre de Dios, es el hombre que por su naturaleza tiende a Dios.
El Valor de la Verdad
Es necesario que también nos preguntemos cuál es el Valor de la Verdad. Esto es hablar bien y siempre con la verdad y comportarse de acuerdo con lo que se piensa. Dice la Biblia en el libro del Eclesiástico 20, 26: "La mentira es una tacha infame en el hombre". El Octavo mandamiento nunca caduca, aunque sea común en la actualidad decir que "Hoy día ya no es posible vivir sin mentira, ya no es posible hacer política y llevar negocios sin mentir".
La Mentira y sus Consecuencias
El hombre es una unidad perfecta. Todo lo que es mentira, falsedad, fingimiento, inautenticidad, rompe esta unidad. El rompimiento se da entre el ser y el actuar, entre el pensar y el decir, entre el decidir y el cumplir. Esto último solo genera: infelicidad, insatisfacción, ruptura de la armonía de la personalidad. La mentira es mala en sí misma, y algo que es malo no puede producir nada bueno, aunque sean muy buenas las intenciones de quien actúa.
La Importancia de la Veracidad
La veracidad es una forma de justicia, pues los demás se merecen la verdad y no el engaño. Vivimos en un mundo donde nos venden la mentira, en las noticias de algunos medios de comunicación; respecto de la verdad del amor, de la familia, de la sexualidad; incluso en algunas Universidades y algunos maestros esconden la verdad del mundo, de las cosas; se niega a veces la existencia de Dios. Pero, por otro lado, el hombre, hoy más que nunca, busca la verdad; busca el sentido de las cosas, sus leyes, y aplicarlas.
Las Exigencias de la Verdad
Son el tener una conciencia recta y bien formada la exigencia para vivir en la verdad, decir la verdad, hacer la verdad en la vida. Urge, pues, formar la conciencia, para poder discernir entre lo bueno y lo malo, la verdad de la mentira, pues sólo la conciencia debe ser el faro único que guíe tus pasos en la oscuridad.
Los Obstáculos en la Búsqueda de la Verdad
Los obstáculos en la búsqueda de la verdad son entre otros:
- El escepticismo radical moderno: afirma que la verdad no existe, o que, si existe, el hombre es incapaz de conocerla.
- El Relativismo: donde se afirma que no hay nada de lo que podamos decir que sea bueno o malo absolutamente, y donde todas las verdades dependen de variadas condiciones y circunstancias que las hacen cambiantes.
- El utilitarismo o pragmatismo: dice que es verdad sólo lo que te sirva y te es práctico.
- Permisivismo: con su filosofía de "todo está permitido", al final es contrario a la verdad de las cosas, a la verdad de la naturaleza.
- Manipulación social: en parlamentos, gobiernos y organismos internacionales o nacionales.
- La falta de formación humanística y filosófica: es un obstáculo para encontrar la verdad porque la formación humanística busca el equilibrio de las facultades humanas, la recta apreciación de las cosas, la capacidad de juicio, la madurez humana, la formación de la inteligencia, etc.
La Mentira y los Atropellos
¿Qué es la mentira? La mentira es decir o hacer lo contrario de lo que se piensa, con intención de engañar. Sólo se miente cuando hay intención real de engañar. Por tanto, va contra la caridad, pues busca confundir y engañar al otro. La mentira puede presentar varias caretas:
- La hipocresía: mentir con la vida.
- La calumnia: culpar al prójimo sobre una falta que sabes que no ha cometido.
- La simulación: mentir con hechos.
- Adulación: adular, para conseguir algo.
¿Puedes Ocular la Verdad?
La obligación del octavo mandamiento de decir siempre la verdad no te obliga a decir todas las verdades que conoces. Hay muchas cosas que tal vez sabes y que la prudencia, la discreción o la caridad te dictan no decirlas a menos que sea indispensable. Tu seguridad y la de los demás, el respeto a la vida privada y el bien común, son causas suficientes para no sentirte obligado a decir las verdades que conoces.
Lo que nos Ofrece la Verdad
- Libertad: La verdad te hará libre. Así lo dijo Jesús. Con la verdad te despojas de prejuicios, liberas tu mente de estereotipos y así te posesionarás de la realidad tal como es, no como te la quieren presentar.
- Apertura hacia la realidad y así ganas en perspectiva y claridad.
- La verdad es dulce y amarga. Al ser dulce perdona, al ser amarga cura, dice san Agustín. Nada hay más dulce que la luz de la verdad, dirá Cicerón.
- La verdad y coherencia te alejan de toda falsedad, incoherencia y doblez, y te confiere una sólida identidad personal.
- La verdad misma y la honradez se defenderá por sí misma y habla por sí misma.
Pidamos entonces a Cristo nuestro Señor quien es la Verdad, el vivir siempre en él, y que en esta vida seamos comprensivo para con las debilidades de nuestro prójimo.