El Perdón de los Pecados
Fundamentos Bíblicos y Sentido de los Profesionales de Fe
El perdón de los pecados es una verdad fundamental en la fe cristiana. En esta serie, exploraremos el credo católico y sus fundamentos bíblicos, y en este artículo específico, profundizaremos en el tema del perdón de los pecados.
¿El perdón de los pecados? ¿Realmente existe? La Iglesia católica afirma que sí, y lo fundamenta en la enseñanza misma de Jesús de Nazaret. En el capítulo 5 de San Marcos, Jesús dice al paralítico: "Hijo, tus pecados te son perdonados" (Marcos 2:5). A continuación, los maestros de la ley murmuran entre sí: "¿Quién es este para perdonar el pecado?" (Marcos 2:6). Este es un tema que aún hoy nos preocupa, ya que muchos de nosotros dudamos del poder de la Iglesia para perdonar los pecados.
La respuesta está en la autoridad que Jesús otorgó a los apóstoles para perdonar los pecados. En el capítulo 20 de San Juan, Jesús les dice a los apóstoles: "Reciban el Espíritu Santo a quienes les perdonen los pecados les serán perdonados y a quienes se lo retengan les serán retenidos" (Juan 20:22-23). Esto significa que la Iglesia tiene la autoridad para perdonar los pecados en el nombre de la Santísima Trinidad.
La Iglesia y el Perdón de los Pecados
La Iglesia católica enfatiza que el bautismo es el primer y principal de los sacramentos para el perdón del pecado, ya que nos limpia del pecado original y nos hace puros. Aunque algunos argumentan que un hombre no puede perdonar los pecados de otro, ya que "maldito es el hombre que confía en otro hombre" (Jeremías 17:5), esta cita se saca de contexto para oponerse a la autoridad de la Iglesia.
La verdad es que Jesucristo instauró el perdón de los pecados y lo dejó a los apóstoles, que a su vez lo transmitieron a los sacerdotes para que lo ejercieran en el sacramento de la confesión. Al acercarnos al sacerdote para pedir perdón, no es el sacerdote quien nos perdona, sino que actúa en el nombre de Dios, diciendo: "Yo te absuelvo de tus pecados en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo".
Cómo Recibir el Perdón de los Pecados
Para recibir el perdón de nuestros pecados, debemos acercarnos al sacramento de la reconciliación y seguir algunos pasos importantes:
- Hacer un examen de conciencia para analizar en qué hemos fallado a Dios.
- Tener un arrepentimiento genuino por lo que hemos hecho mal.
- Tener un propósito de no volver a cometer los pecados confesados.
- Cumplir la penitencia que nos impone el confesor.
La Misericordia de Dios
El perdón de los pecados es la misericordia de Dios derramada en su pueblo, y no lo merecemos. Debemos acercarnos a Dios con un corazón contrito y humillado, como lo hizo el hijo pródigo en el capítulo 15 de San Lucas. Dios siempre está presto para reconciliarse con nosotros y nos da el privilegio de poder acercarnos a Él a través del sacramento de la reconciliación.
Conclusión
El perdón de los pecados es una verdad fundamental en la fe cristiana, y la Iglesia católica lo fundamenta en la enseñanza de Jesús de Nazaret. Al acercarnos al sacramento de la confesión con un corazón arrepentido y humillado, podemos recibir el perdón de nuestros pecados y vivir en la misericordia de Dios.